El mantenimiento de un microbioma intestinal equilibrado es fundamental para mantenerse sano y poder disfrutar de una buena salud. Para ello es necesario que exista un armónico equilibrio entre nuestra bioquímica y los microbios que pueblan nuestro intestino.
El microbioma intestinal procesa las materias primas que necesitamos para apoyar todos los sistemas del organismo. Si está sano genera un mejor equilibrio en todas las reacciones de síntesis y de construcción, protegiendo así a nuestro cuerpo. Si en cambio se encuentra dañado promueve el desequilibrio entre los componentes básicos, lo que hace que el cuerpo sea mucho más susceptible a sufrir problemas de salud.
El conjunto de alteraciones o desequilibrios en el microbioma se ha asociado a un amplio espectro de problemas de salud y recibe el nombre de: disbiosis intestinal.
La sociedad moderna está creando nuevos retos en el cuidado de la salud, y el microbioma intestinal puede ser dañado por varios factores que deberíamos considerar a la hora de mantenerlo saludable:
  • Alimentos procesados y con conservantes que consumimos a menudo.
  • Productos de uso diario en nuestro hogar cargados de xenoestrógenos y petroquímicos
  • Medicamentos que tomamos habitualmente como antibióticos, estatinas o inhibidores de la bomba de protones.
  • Días a tope de estrés que nos obliga a vivir a contrarreloj.
Realizar estudios completos, integrales y personalizados de tu microbioma y tu bioquímica pueden ofrecer datos valiosos para diseñar un programa de alimentación saludable, tips nuevos para tu día a día, y recomendaciones de vitaminas, probióticos, enzimas digestivas, minerales, oligoelementos que refuerzan tu salud intestinal la cual resulta fundamental para una buena salud gastrointestinal general, una inmunidad eficiente, un equilibrio emocional, mayor agudeza cognitiva y una buena eficiencia energética.
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Carolina Hernández 2020
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